Despues de comer en un kibutz judio, muy agradable a las afueras de Jerusalem, visitamos las ruinas del palacio de Caifas ( a media hora caminado de Getsemaní). Es maravilloso situar los lugares de los que tanto has oido hablar. Todo cuadra. El palacio, era extramuros de la ciudad de Jerusalem, en el monte Sion, justo debajo de la ciudadela de David, en donde tenía su residencia toda la clase dirigente del Senedrín. Algo así como "la Moreleja" de Jerusalem. Por eso Caifas remite a Jesus a su suegro Anas (el antiguo Sumo Sacerdote) a quien le debía el puesto. Anas, el auténtico artifice de la detención, en el poder a sombra, lo recibió en su casa con otros senedritas, pero estamos hablando de una distancia no mayor de 300 metros, por eso dio tiempo a tanto. De ahí al gobernador Pilatos, y este al Rey Herodes, quien no estaba alojado en su palacio habitual en la ciudad, pues era costumbre cederselo al gobernador romano cuando este viajaba a Jerusalem. El palacio de Herodes estaba justo en la entrada que mira hacia el monte Sion. Por eso, y esto es una deducción mía, pienso que Herodes de no estar en su palacio,estaría en algún lugar de la Zona digna de Sion, Esto permitió que todos estos desplazamientos (Caifas, Anas, Pilatos, Herodes, Pilatos), se hicieron en un área de un par de kilometros como mucho y el trasiego de Jesus resulta mucho mas comprensible sobre el terreno que por la mera lectura evengélica.
El lugar del palacio de Caifas fue comprado por la iglesia católica, quien edificó alli la iglesia del canto del gallo, al ser su patio testigo del episodio de las negaciones de Pedro
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